lunes, 24 de abril de 2017

DESARROLLO MOTOR GRUESO Y DESARROLLO MOTOR FINO



El desarrollo motor grueso y fino, también conocido como motricidad fina y gruesa, está relacionado con las áreas motoras de la persona, de posición y movimiento, que entran en juego.
Las diferencias entre el desarrollo motor grueso y el fino residen en las áreas implicadas. La motricidad gruesa está referida a los cambios de posición del cuerpo y a la capacidad para mantener el equilibrio, es decir, que implica el uso hábil del cuerpo como un todo e incluye la postura y la movilidad.
El área motora fina se relaciona con los movimientos finos coordinados entre ojos y manos, implica el uso de partes individuales del cuerpo, como decimos especialmente las manos, aunque también otros grupos de músculos pequeños.
En el desarrollo motor de bebés y niños los hitos se pueden diferenciar entre motricidad gruesa y fina prácticamente desde el nacimiento.
Podemos decir que el desarrollo motor grueso es el primero en hacer su aparición, desde el momento en el que el bebé empieza a sostener su cabeza. Sentarse sin apoyo, gatear, caminar, correr, saltar, subir escaleras... son otros logros de motricidad gruesa que, con el paso de los años, irá adquiriendo y aprendiendo el niño.
Por su parte, el desarrollo motor fino se hace patente un poco más tarde, cuando el bebe se descubre las manos, las mueve observándolas y comienza a intentar coger los objetos y manipular su entorno. La motricidad fina incluirá tareas como dar palmadas, la habilidad de pinza, realizar torres de piezas, tapar o destapar objetos, cortar con tijeras... hasta alcanzar niveles muy altos de complejidad.

Las primeras capacidades correspondientes a la motricidad gruesa y fina, si el bebé no tiene problemas sensoriales o físicos, suelen adquirirse simplemente en relación con el entorno. Sin embargo, nosotros podemos actuar para facilitarles determinados logros o enseñarles otros, mediante la estimulación.

No significa que debamos darle "clases" o lecciones, simplemente jugando con ellos, hablándoles, inventando nuevos retos juntos, estamos contribuyendo al desarrollo motor grueso y fino de bebés y niños, al tiempo que lo pasamos bien y fortalecemos los vínculos.


domingo, 23 de abril de 2017

DESARROLLO DE BEBE A NIÑO


Ha habido un importante desarrollo motor que les ha hecho crecer de bebés a niños, al tiempo que su psicología y su afectividad también han experimentado una evolución impresionante en estos primeros años de vida. Los logros motores del primer año traerán una independencia cada vez mayor, lo que permite a los niños explorar su entorno más ampliamente e iniciar la interacción con los demás. En el segundo año de vida, los niños se vuelven más móviles como sus habilidades motoras más perfeccionadas. Los expertos en desarrollo infantil creen que la actividad motora durante el segundo año es vital para el desarrollo competente del niño y que pocas restricciones, con excepción de la seguridad, deben ser colocados en sus aventuras.
Llegados a los seis años, los niños son más autónomos e independientes, conocen mejor su cuerpo, sus posibilidades y sus limitaciones, sus movimientos adquieren seguridad... Lo fundamental para todos los aspectos es que tengan un entorno que les acompañe y ayude en este desarrollo.






 

sábado, 22 de abril de 2017

CONOCIENDO EL CRECIMIENTO DEL BEBE

El desarrollo motor no se produce de forma aislada, más bien se verá influido por las características biológicas que el niño posea (tales como la herencia y la maduración), por el ambiente en que se desarrolle, las oportunidades para el movimiento que se encuentran en su entorno (por ejemplo: juguetes, columpios en el patio trasero, escaleras para subir en el hogar) y su propio desarrollo motor.
El término se refiere a un aprendizaje motor de cambio relativamente permanente en el comportamiento, como resultado de la práctica o experiencia. Aunque el aprendizaje no puede ser observado directamente, se puede inferir en el movimiento motor. Para el desarrollo de las habilidades motoras, los niños deben percibir algo en el ambiente que les motive a actuar utilizando sus percepciones para influir en sus movimientos. Las habilidades motoras representan soluciones a los objetivos de los niños. Cuando ellos se sienten motivados a hacer algo, pueden crear un nuevo comportamiento motor.
El nuevo comportamiento es el resultado de muchos factores:
El desarrollo del sistema nervioso
Las propiedades físicas del cuerpo y sus posibilidades de movimiento
La meta que el niño está motivado para alcanzar
El apoyo del entorno
Por ejemplo, los bebes aprenden a caminar sólo cuando la maduración del sistema nervioso les permite controlar ciertos músculos de las piernas, cuando sus piernas han crecido lo suficiente como para soportar su peso y una vez que han adquirido otras habilidades previas.
Inicialmente se pensaba que este desarrollo era un reflejo directo de los cambios madurativos en el sistema nervioso central. Actualmente se sabe que este proceso es bastante complejo, ya que integra aspectos del individuo como sus características físicas, estructurales y emocionales, estímulos externos que abarcan el medio ambiente en el que opera y la tarea / movimiento que realiza con un propósito. Es un proceso bastante dinámico y la interacción de estos tres componentes da lugar a la adquisición y desarrollo de habilidades motoras.
Varios factores, sin embargo, pueden poner en peligro el curso normal del desarrollo de un niño. Estos se definen como factores de riesgo de una serie de factores biológicos o ambientales que aumentan la probabilidad del déficit en el desarrollo motor de las condiciones del niño. Entre las principales causas de retraso motor encontramos:
Bajo peso al nacer
Trastornos cardiovasculares.
Trastornos respiratorios y neurológicos
Infecciones neonatales
Desnutrición
Condiciones socio-económicas bajas
Mala educación de los padres
Nacimiento prematuro.
Cuanto mayor sea el número de factores de riesgo activos, mayores serán las posibilidades de déficit en el desarrollo.
El desarrollo motor atípico no está relacionado necesariamente a la presencia de cambios neurológicos o estructurales (incluso los niños que no tienen secuelas graves pueden presentar déficit en algunas áreas de su desarrollo neurológico). En los primeros años de vida (primeros 12 a 18 meses) hay una mayor plasticidad del cerebro, lo que permite la optimización de los beneficios del desarrollo motor.


 

viernes, 21 de abril de 2017

jueves, 20 de abril de 2017

DESARROLLO

DESARROLLO DEL TEMA
El desarrollo motor en los primeros años de vida es fascinante. Desde que nacen, los bebés van desarrollando su sistema motor, sus movimientos y el modo en el que manipula su entorno, a un ritmo muy rápido y continuo.
La maduración del sistema nervioso, responsable del desarrollo motor, tiene un orden preestablecido y por ello el desarrollo tiene una secuencia clara y predecible, aunque no sea exacta en cada bebé y niño, ya que depende de factores diversos.
Este es un resumen de las capacidades motoras que los bebés y niños tienen hasta los seis años de edad, una guía de lo que "deberían" ser capaces de hacer, aunque puede haber diferencias en cuanto al ritmo del desarrollo.
Comportamiento motor de los 0 a los 4 meses
·         Levanta la cabeza.
·         Mantiene las manos predominantemente abiertas.
·         Sostiene un objeto con los dedos y la palma de la mano.
De los 4 a los 8 meses
·         Mantiene levantada la cabeza y el pecho.
·         Coge los objetos.
·         Rueda sobre el estómago y queda en posición supina.
·         Sentado con apoyo gira la cabeza a ambos lados.
·         Se lleva un objeto a la boca.
·         Junta las manos en las línea media.
·         Coge un caramelo con varios dedos.

Comportamiento motor de los 8 a los 12 meses
·         Se sienta sin ayuda.
·         Se pone de pie apoyándose en cosas o personas.
·         Gatea, se arrastra, se desliza.
·         Pasa los objetos de una mano a otra.
·         Da un juguete.
·         Se pone boca abajo estando boca arriba.
·         Suelta un objeto deliberadamente para coger otro.
De los 12 a los 18 meses
·         Permanece de pie sin ayuda.
·         Camina con ayuda.
·         Sube una escalera gateando o con ayuda.
·         Domina la conducta o el agarre de  pinza.
·         Comienza a comer por sí mismo.
·         Construye una torre con tres cubos.
·         Se sienta en una silla pequeña.


De los 18 a los 24 meses
·         Camina sin apoyo.
·         Corre.
·         Se levanta sin apoyo.
·         Tira y chuta una pelota.
·         Sube y baja las escaleras con ayuda colocando ambos pies en cada escalón.
·         Mete anillas en un soporte.
·         Usa un caballito de mecer o una silla mecedora.
·         Imita un movimiento circular.
·         Se pone en cuclillas y vuelve a ponerse de pie.
De los dos a tres años
·         Camina, corre, sube escaleras.
·         Puede pedalear en un triciclo.
·         Anda dos o tres pasos siguiendo una línea.
·         Se mantiene sobre un pie.
·         Tira la pelota hacia delante.
·         Salta con los pies juntos.
·         Abre una puerta.
·         Camina hacia atrás.
·         Desenvuelve un objeto.

De los tres a los cuatro años
·         Da una voltereta.
·         Imita posturas con los brazos.
·         Baja las escaleras alternando los pies.
·         Pasa la página de un libro.
·         Sujeta el papel mientras dibuja.
·         Dobla una hoja de papel por la mitad.
·         Corta con tijeras.
·         Dobla dos veces un papel.
·         Copia una línea vertical y un círculo.
·         Arma un rompecabezas de tres piezas o un tablero de figuras.
·         Camina de puntillas.
·         Sube a un tobogán y se desliza.
·         Traza con plantillas siguiendo los contornos.
·         Comportamiento motor de los cuatro a los seis años
·         Salta sobre un pie.
·         Se mantiene sobre un pie alternativamente con los ojos cerrados.
·         Salta hacia delante con los pies juntos.
·         Se inclina y toca el suelo con las manos.
·         Abre un candado con llave.
·         Hace una pelota arrugando papel.
·         Hace un nudo.
·         Copia una cruz, un triángulo, un cuadrado y un rombo.
·         Corta con tijeras siguiendo una línea.
·         Dibuja una persona con seis partes.
·         Copia palabras sencillas, con letra mayúscula y minúscula.
·         Copia los números y fechas.
·         Cambia de dirección al correr.
·         Camina en una tabla manteniendo el equilibrio.
·         Salta hacia atrás.
Llegados a los seis años, los niños son más autónomos e independientes, conocen mejor su cuerpo, sus posibilidades y sus limitaciones, sus movimientos adquieren seguridad... Lo fundamental para todos los aspectos es que tengan un entorno que les acompañe y ayude en este desarrollo.

Ha habido un importante desarrollo motor que les ha hecho crecer de bebés a niños, al tiempo que su psicología y su afectividad también han experimentado una evolución impresionante en estos primeros años de vida.
   

miércoles, 19 de abril de 2017

DEFINICION

El desarrollo motor: se considera como un proceso secuencial y continúo relacionado con el proceso por el cual, los seres humanos adquieren una enorme cantidad de habilidades motoras. Este proceso se lleva a cabo mediante el progreso de los movimientos simples y desorganizados para alcanzar las habilidades motoras organizadas y complejas.
El término se refiere a un aprendizaje motor de cambio relativamente permanente en el comportamiento, como resultado de la práctica o experiencia. Aunque el aprendizaje no puede ser observado directamente, se puede inferir en el movimiento motor.

INTRODUCION



Desarrollo Motor.
  El desarrollo del niño ocurre en forma secuencial, una habilidad ayuda a que surja otra.  Es progresivo, siempre se van acumulando las funciones simples primero, y después la más complejas.  Todas las partes del sistema nervioso actúan en forma coordinada para facilitar el desarrollo; cada área de desarrollo interactúa con las otras para que ocurra una evolución ordenada de las habilidades.
La dirección que sigue el desarrollo motor es de arriba hacia abajo, primero controla la cabeza, después el tronco.  Va apareciendo del centro del cuerpo hacia afuera, pues primero controla los hombros y al final la función de los dedos de la mano.